viernes, enero 18, 2008

Más Luz

«Nada es más real que la nada.»
Samuel Beckett


La imagen…

La luz, el encuadre, el movimiento, el color, el contraste, todo tiene un papel extremadamente importante en el significado que tenga una imagen, todo… incluso el vacío… ese vacío que queda envolviendo a los sujetos… ese espacio, que a veces no se ve, pero nos permite ver… ese espacio llamado en arte… espacio negativo…



Al igual que en la música los silencios son esenciales para que podamos apreciar, entender y disfrutar de los acordes compuestos y dispuestos en el tiempo y el espacio, en la composición de las imágenes, los espacios vacíos que rodean al sujeto, son de suma importancia. Esos espacios vacíos, son los que componen y realzan el tema de la imagen.

Un tema que en todo momento está creado, buscado y construido usando la luz como herramienta principal.

Usando la luz, creando un tema, trabajando las sombras y los puntos de luz, los espacios positivos y los negativos… eso es lo que definirá el sentimiento, la atmósfera y el sentido último de la imagen.



Y para ello, vuelve a ser necesario incidir sobre lo que realmente importante que es la luz.

La luz.

La luz… Sin ella el cine no existiría… igual que sin tintes no existe la pintura y sin el sonido no hay música, para el cine la luz, es el elemento principal que torna las ideas, los sentimientos y las historias en verdades sobre la pantalla.

Al igual que todo en la naturaleza, que tiene un positivo y un negativo, la luz no puede existir sin la sombra, sin su contrario natural, el sonido no existe sin los silencios, y la tristeza no puede existir sin la felicidad, todo está unido, y en fotografía, la luz y las sombras deben conjugarse, equilibrarse, balancearse, componerse, relacionarse y unirse para formar una imagen que vaya más allá de la simple replica de la realidad y convierta el espacio iluminado y fotografiado en una pista, accesible y sencilla para llegar a un sentimiento.

El acto de iluminar, de fotografiar, de encuadrar, de componer, es por tanto un acto que mediante la mirada subjetiva del fotógrafo, del director otorga un significado a la imagen compuesta y rodada.



«La expresión para mí no consiste en la pasión reflejada en un rostro humano, o revelada por un gesto violento. Toda la organización de mi pintura es expresiva. El lugar que ocupan las figuras u objetos, los espacios vacíos a su alrededor, las proporciones, todo cumple su papel.»
Henri Matisse
«Notes d'un peintre»


Esa mirada subjetiva es la que define los parámetros del lenguaje propio de cada director, y de cada director de fotografía. Cada uno ve la luz de una forma distinta. Cada uno crea la luz en función de lo que necesita, y cada uno encuadra según lo que quiere transmitir, lo que quiere sentir, lo que quiere hacer sentir.

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